TIEMPO DE ELABORACIÓN ACTIVA: 20 MIN
TIEMPO TOTAL: 20 MIN (+ 1H en el congelador mínimo)
INGREDIENTES PARA 16 TRUFAS:
Para las trufas…
- 120 g de dátiles sin hueso
- 160 g de almendras crudas
- 75 g de anacardos crudos
- 1 cda grande (30 g) de Tahini (Pasta de sésamo tostado)
- 1/2 cdita de canela
- 1/2 cdita de vainilla
- 1 cda de agua (10 g)
- 1 pellizco de sal
Para el rebozado…
- Cacao puro en polvo
- Coco rallado
- Pistachos molidos
- Remolacha en polvo
- Almendras en cubitos
- ¡Lo que se te ocurra!
ELABORACIÓN:
- Lo primero que haremos será hidratar en agua caliente los dátiles durante al menos 30 minutos.
- Después trituraremos las almendras y los anacardos hasta que veamos cubitos pequeños. No debemos pasarnos triturando porque no buscamos que se hagan mantequilla.
- Añadimos los dátiles hidratados a la mezcla triturada de frutos secos, la cucharada de pasta de sésamo tostado, la cucharada de agua, la sal y las especias y volvemos a triturar un poco más.
- Observamos que se haya mezclado todo bien, no hay que pasarse con el triturado porque queremos encontrarnos trozos de fruto seco en la trufa, no buscamos una masa uniforme.
- Cuando ya esté la masa lista formamos 16 bolitas del mismo tamaño con las manos y las vamos rebozando en los toppings que más nos gusten. Yo he utilizado cacao puro en polvo, coco rallado y pistachos molidos que preparé yo misma con la batidora.
Si al formar las bolas no se quedan compactas podéis añadir un poco más de agua a la masa pero con estas cantidades a mí me quedaron perfectas. Si a la hora de rebozar las trufas no se os pegan bien los toppings podéis mojar la superficie de la trufa con un poco de agua. Unas vez listas las meteremos en el congelador al menos 1 hora y posteriormente las podemos conservar durante varias semanas en un tupper en el congelador. Antes de comerlas, solo tendremos que esperar unos minutos, no se van a congelar nunca, y están buenísimas así duritas y frías. Es comodísimo hacer muchas y dejarlas en el congelador para irlas comiendo a media mañana en la oficina, antes de entrenar o donde sea. Son bastante calóricas ya que están formadas por frutos secos, pero no contienen azúcares libres y las grasas de los frutos secos son muy sanas por lo que son ideales para saciarnos de forma saludable entre horas y evitar picar con algún ultra procesado insano.
¡Espero que os guste foodies!
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